Un grupo de chicos jóvenes de vacaciones se lo pasan en grande con los condones, haciendo globos y otras formas con ellos, y luego poniéndoselos en la polla a toda pastilla. Entonces se hacen una pregunta tonta: ¿qué se siente al ser bombeado con un condón en la polla? Empieza así, pero la sensación no es tan buena: el condón sale a chorros, pero la mamada no termina hasta que el zumo también sale a chorros. ¡La intromisión del intelectual del grupo no hará nada por amortiguar la determinación de estos jóvenes por vaciar sus testículos ! ¡Como todo lo bueno llega a los que perseveran, fuegos artificiales blancos cubren las piscinas de esta feliz compañía !
